El arzobispo de Tucumán, monseñor Luis Héctor Villalba, se reunió con seis de los nueve diputados nacionales que representan a la provincia en el Congreso. Según explicaron los parlamentarios tras el encuentro, les dio a conocer, mediante un documento, la posición de la Iglesia Católica respecto del matrimonio homosexual.
De a uno fueron llegando Gerónimo Vargas Aignasse (PJ), Alfredo Carlos Dato (PJ), Norah Castaldo (UCR), Germán Alfaro (PJ), Juan Casañas (UCR) y Miriam Gallardo de Dip (PJ). No asistieron los peronistas Juan Salim, Stella Maris Córdoba y Susana Díaz.
En general, los legisladores nacionales coincidieron en que el tema no es prioritario. No obstante, la mayoría admitió la necesidad de avanzar en el otorgamiento de derechos a ciudadanos que deseen vincularse con personas del mismo sexo sobre la base de la unión civil, pero no del matrimonio. Por último, concordaron en que, llegado el caso, las votaciones se realizarán de modo individual y no por mandato de bloque.
Cuestiones jurídicas
Dato adelantó que votará en contra del matrimonio de personas de un mismo sexo, sobre fundamentos jurídicos. "En el derecho positivo argentino están consagrados la posibilidad de que hereden, de que puedan asociarse, de que sean beneficiarios de una obra social, de que accedan a una jubilación; y como la ley no es la que provoca afecto -eso surge dentro de la pareja- no creo que haga falta", dijo el ex magistrado.
Gallardo celebró el encuentro, al que calificó de ameno. "Más allá de los partidos políticos, todos coincidimos en que el tema tiene muchas facetas. Debemos atender que hay gente que está pidiendo que se reconozcan sus derechos y que las legislaciones deben adaptarse en consecuencia; pero también hay límites que debemos tener en cuenta", puntualizó. La oriunda de Lules aclaró que unión civil no implica matrimonio. "Dentro de la unión civil hay ciertos derechos que son atendibles, y hay que dar respuestas a estos; dentro del matrimonio, hay temas muy delicados, que tienen que ver con adopción, por ejemplo", detalló.
Sobre este punto también se mostró prudente Vargas Aignasse. "Así como estoy en contra del aborto, estoy a favor de que se respeten los derechos de todos los sectores, de todas las minorías, según lo expresan el artículo 16 de la Constitución nacional y los tratados internacionales. Pero creo que hay que ser muy razonables; hay artículos del proyecto con los que no estoy muy de acuerdo, que ameritan un estudio mucho más profundo, como es el tema de la adopción", indicó.
El opositor Casañas aclaró que otros temas, a su criterio, merecen ser atendidos con antelación. Entre ellos, mencionó la pobreza, la desocupación, la inseguridad, la parálisis en el Congreso y la política exterior del Gobierno nacional. "Por una cuestión doméstica, hoy tenemos un conflicto con una de las principales economías del mundo", arremetió, en referencia a la negativa de China de adquirir productos derivados de la soja argentina. Sobre el matrimonio homosexual, el ruralista opinó en similares términos que sus pares: "todos debemos tener derechos. La unión civil podría contener las inquietudes que esta planteando esta gente. Pero de ahí al matrimonio… me parece que no estamos preparados para tratarlo todavía". A modo de ejemplo, advirtió que no son muchas las naciones en el mundo que lo atienden en su legislación. "Si no me equivoco, hay 10 países que tienen aprobada esta ley; a nosotros nos falta tanto para aprobar, para trabajar... Después trataremos este tema con el respeto que se merece: hay cosas que son mas importantes para la Argentina", afirmó.
De a uno fueron llegando Gerónimo Vargas Aignasse (PJ), Alfredo Carlos Dato (PJ), Norah Castaldo (UCR), Germán Alfaro (PJ), Juan Casañas (UCR) y Miriam Gallardo de Dip (PJ). No asistieron los peronistas Juan Salim, Stella Maris Córdoba y Susana Díaz.
En general, los legisladores nacionales coincidieron en que el tema no es prioritario. No obstante, la mayoría admitió la necesidad de avanzar en el otorgamiento de derechos a ciudadanos que deseen vincularse con personas del mismo sexo sobre la base de la unión civil, pero no del matrimonio. Por último, concordaron en que, llegado el caso, las votaciones se realizarán de modo individual y no por mandato de bloque.
Cuestiones jurídicas
Dato adelantó que votará en contra del matrimonio de personas de un mismo sexo, sobre fundamentos jurídicos. "En el derecho positivo argentino están consagrados la posibilidad de que hereden, de que puedan asociarse, de que sean beneficiarios de una obra social, de que accedan a una jubilación; y como la ley no es la que provoca afecto -eso surge dentro de la pareja- no creo que haga falta", dijo el ex magistrado.
Gallardo celebró el encuentro, al que calificó de ameno. "Más allá de los partidos políticos, todos coincidimos en que el tema tiene muchas facetas. Debemos atender que hay gente que está pidiendo que se reconozcan sus derechos y que las legislaciones deben adaptarse en consecuencia; pero también hay límites que debemos tener en cuenta", puntualizó. La oriunda de Lules aclaró que unión civil no implica matrimonio. "Dentro de la unión civil hay ciertos derechos que son atendibles, y hay que dar respuestas a estos; dentro del matrimonio, hay temas muy delicados, que tienen que ver con adopción, por ejemplo", detalló.
Sobre este punto también se mostró prudente Vargas Aignasse. "Así como estoy en contra del aborto, estoy a favor de que se respeten los derechos de todos los sectores, de todas las minorías, según lo expresan el artículo 16 de la Constitución nacional y los tratados internacionales. Pero creo que hay que ser muy razonables; hay artículos del proyecto con los que no estoy muy de acuerdo, que ameritan un estudio mucho más profundo, como es el tema de la adopción", indicó.
El opositor Casañas aclaró que otros temas, a su criterio, merecen ser atendidos con antelación. Entre ellos, mencionó la pobreza, la desocupación, la inseguridad, la parálisis en el Congreso y la política exterior del Gobierno nacional. "Por una cuestión doméstica, hoy tenemos un conflicto con una de las principales economías del mundo", arremetió, en referencia a la negativa de China de adquirir productos derivados de la soja argentina. Sobre el matrimonio homosexual, el ruralista opinó en similares términos que sus pares: "todos debemos tener derechos. La unión civil podría contener las inquietudes que esta planteando esta gente. Pero de ahí al matrimonio… me parece que no estamos preparados para tratarlo todavía". A modo de ejemplo, advirtió que no son muchas las naciones en el mundo que lo atienden en su legislación. "Si no me equivoco, hay 10 países que tienen aprobada esta ley; a nosotros nos falta tanto para aprobar, para trabajar... Después trataremos este tema con el respeto que se merece: hay cosas que son mas importantes para la Argentina", afirmó.